Estar continuamente en el pasado puede generar depresión, estar
obsesionado con el futuro puede generar ansiedad. En realidad lo único
que tenemos es el presente, el ahora, este preciso instante. Trabajar la
atención plena en el presente nos permite ser más conscientes de lo que
hacemos, de lo que vivimos y sentimos. Practicando la meditación en el
presente podemos hacer de toda nuestra vida una continua meditación
consiguiendo una paz interior donde el no juzgarnos ni juzgar al otro,
la aceptación y la compasión nos permite sentir cada momento de forma
diferente y vivirlo intensamente. El pasado es historia, el futuro un
misterio pero hoy es un don al que llamamos presente ¡Vívelo!
No hay comentarios:
Publicar un comentario